La Paz, 1 Junio (LÍDER ).- El Ministerio de Salud y Deportes, a través de la Unidad de Promoción de la Salud, trabaja en la modificación de algunos artículos del Decreto Supremo No. 29376 - Reglamento Específico de Control de Tabaco (REAT por sus siglas en inglés), con la finalidad de subsanar los vacíos legales que no fueron contemplados en su oportunidad.
El Reglamento Específico de Control de Tabaco (REAT), que fue promulgado en diciembre de 2007 tiene muchos vacíos legales, según el Responsable del Área de Prevención de Drogas lícitas e ilícitas del Ministerio de Salud, Dr. Jonny Cachi, “por ello estamos trabajando en la modificación con el objetivo de elevarlo a rango de Ley”, anunció.
El artículo 4 de dicho reglamento es el más polémico porque trata sobre la tolerancia que se da a los propietarios de cualquier centro de reunión, diversión, recreación o de entretenimiento para mayores de dieciocho años, quienes pueden decidir que en su local se permite fumar, sólo advirtiendo de esta condición con un letrero visible, aspecto que va en contra de las disposiciones del Convenio Marco de Control del Tabaco y de la Constitución Política del Estado, que en el artículo 347 indica textualmente que todas la personas “que realicen actividades de impacto sobre el medio ambiente deberán, en todas las etapas de producción, evitar, minimizar, mitigar, remediar, reparar y resarcir los daños que se ocasionen al medio ambiente y a la salud de las personas y establecerán las medidas de seguridad para neutralizar los efectos posibles de los pasivos ambientales”.
Asimismo se pretende modificar aspectos que tratan sobre la publicidad, promoción y patrocinio, adelantó el Dr. Cachi, “porque de alguna manera obstaculizan el control efectivo de este producto dañino”, agregó.
En ocasión del “Día Mundial sin Tabaco” que se celebra a nivel mundial cada 31 de mayo, serán anunciadas estas medidas en un acto que se realizará en el auditorio del Ministerio de Salud y Deportes, donde además se presentarán la página Web y el manual de Ambientes 100% libres de humo de Tabaco”, elaborado por esta cartera de Estado en coordinación con la Alianza para el Convenio Marco.
En esta oportunidad la temática manejada a nivel mundial es “la interferencia tabacalera”.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud OPS/OMS, “las tácticas de la industria tabacalera para socavar el control del tabaco deben ser expuestas y resistidas” porque no hacen otra cosa que intimidar a los gobiernos nacionales a realizar un control efectivo y emitir normas legales que pongan un alto a su comercialización.
La epidemia del tabaquismo se ha convertido en un grave problema de salud y desarrollo debido a sus enormes costos sociales, económicos y medioambientales.
En el país esta enfermedad tiene más del 30% de prevalencia y mata prematuramente a 7 bolivianos y bolivianas al día; así mismo los fumadores pasivos sufren de morbimortalidad relacionada al tabaquismo desde la niñez.
El contrabando y evasión de impuestos genera millonarias pérdidas al Estado, pero el tabaquismo también afecta a la economía familiar al restar 17% de los ingresos gastados en tabaco; la niñez y los agricultores de tabaco son víctimas de explotación laboral.
El humo de tabaco es más contaminante que un incendio forestal, las colillas de cigarrillos generan grandes cantidades de basura tóxica, los cultivos de tabaco y la producción industrial de cigarrillos contaminan los suelos, el agua y el aire, además de ser causantes de deforestación.
Pese a la gravedad del problema, las transnacionales del tabaco continúan con su marketing engañoso dirigido al público más joven (niñez y adolescencia) y desplegando estrategias elaboradas de interferencia de las políticas públicas y la aplicación efectiva de la ley No 3029 del Convenio Marco de Control del Tabaco, además de promover el contrabando y medidas inefectivas que no impactan sobre la epidemia del tabaquismo.
Desde el año 2005, el Estado Plurinacional de Bolivia se convirtió en Estado Parte del primer tratado mundial de salud pública dirigido a combatir el tabaquismo, el Convenio Marco del Control del Tabaco (CMCT), siendo implementado como ley nacional, No. 3029.
Estas medidas intersectoriales requieren ser difundidas, para que la población ejerza sus derechos y pueda tomar medidas de protección frente a la epidemia. (Min. Salud)
El artículo 4 de dicho reglamento es el más polémico porque trata sobre la tolerancia que se da a los propietarios de cualquier centro de reunión, diversión, recreación o de entretenimiento para mayores de dieciocho años, quienes pueden decidir que en su local se permite fumar, sólo advirtiendo de esta condición con un letrero visible, aspecto que va en contra de las disposiciones del Convenio Marco de Control del Tabaco y de la Constitución Política del Estado, que en el artículo 347 indica textualmente que todas la personas “que realicen actividades de impacto sobre el medio ambiente deberán, en todas las etapas de producción, evitar, minimizar, mitigar, remediar, reparar y resarcir los daños que se ocasionen al medio ambiente y a la salud de las personas y establecerán las medidas de seguridad para neutralizar los efectos posibles de los pasivos ambientales”.
Asimismo se pretende modificar aspectos que tratan sobre la publicidad, promoción y patrocinio, adelantó el Dr. Cachi, “porque de alguna manera obstaculizan el control efectivo de este producto dañino”, agregó.
En ocasión del “Día Mundial sin Tabaco” que se celebra a nivel mundial cada 31 de mayo, serán anunciadas estas medidas en un acto que se realizará en el auditorio del Ministerio de Salud y Deportes, donde además se presentarán la página Web y el manual de Ambientes 100% libres de humo de Tabaco”, elaborado por esta cartera de Estado en coordinación con la Alianza para el Convenio Marco.
En esta oportunidad la temática manejada a nivel mundial es “la interferencia tabacalera”.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud OPS/OMS, “las tácticas de la industria tabacalera para socavar el control del tabaco deben ser expuestas y resistidas” porque no hacen otra cosa que intimidar a los gobiernos nacionales a realizar un control efectivo y emitir normas legales que pongan un alto a su comercialización.
La epidemia del tabaquismo se ha convertido en un grave problema de salud y desarrollo debido a sus enormes costos sociales, económicos y medioambientales.
En el país esta enfermedad tiene más del 30% de prevalencia y mata prematuramente a 7 bolivianos y bolivianas al día; así mismo los fumadores pasivos sufren de morbimortalidad relacionada al tabaquismo desde la niñez.
El contrabando y evasión de impuestos genera millonarias pérdidas al Estado, pero el tabaquismo también afecta a la economía familiar al restar 17% de los ingresos gastados en tabaco; la niñez y los agricultores de tabaco son víctimas de explotación laboral.
El humo de tabaco es más contaminante que un incendio forestal, las colillas de cigarrillos generan grandes cantidades de basura tóxica, los cultivos de tabaco y la producción industrial de cigarrillos contaminan los suelos, el agua y el aire, además de ser causantes de deforestación.
Pese a la gravedad del problema, las transnacionales del tabaco continúan con su marketing engañoso dirigido al público más joven (niñez y adolescencia) y desplegando estrategias elaboradas de interferencia de las políticas públicas y la aplicación efectiva de la ley No 3029 del Convenio Marco de Control del Tabaco, además de promover el contrabando y medidas inefectivas que no impactan sobre la epidemia del tabaquismo.
Desde el año 2005, el Estado Plurinacional de Bolivia se convirtió en Estado Parte del primer tratado mundial de salud pública dirigido a combatir el tabaquismo, el Convenio Marco del Control del Tabaco (CMCT), siendo implementado como ley nacional, No. 3029.
Estas medidas intersectoriales requieren ser difundidas, para que la población ejerza sus derechos y pueda tomar medidas de protección frente a la epidemia. (Min. Salud)
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