Bolivia 12 Jul. (LIDER / Erbol).- Entre los datos obtenidos
relacionados con diversidad cultural destaca que cerca de la mitad de los
entrevistados se autoidentifica como mestizo y la autoidentifcación como
indígena se incrementó notablemente. Los pueblos indígenas más conocidos entre
la población consultada son quechuas, aymaras, guaraníes y chiquitanos, en ese
orden, señala el informe de UNIR.
Agrega que los resultados indican
una disminución de la migración en los últimos cinco años. En general la
valoración de las diferentes culturas entre sí es positiva, resaltándose
cualidades como “trabajadores” o “fuertes”, sin embargo, la cualidad negativa
del autoritarismo y la violencia es mencionada por más de la mitad de los
entrevistados. Las diferentes identidades se muestran receptivas a trabajar
entre ellas, pero no a recibir a un miembro de otro grupo sociocultural en la
familia.
En la tercera encuesta, encargada
a IPSOS a findes de 2011, se consultaron a 2.576 personas distribuidas en los
nueve capitales de departamento, la ciudad de El Alto y 12 ciudades intermedias
(Patacamaya, Caranavi, Quillacollo, Villa Tunari, Montero, Yapacaní,
Challapata, Uyuni, Tarabuco, Yacuiba, Riberalta y Puerto Rico). El margen de
error aproximado fue de +1,96 por ciento, lo que otorga a los resultados de la
encuesta un nivel de confianza de 95 por ciento. Los datos fueron procesados
considerando factores de ponderación determinados por ciudad, edad, género y
nivel socioeconómico de acuerdo a la distribución real de la población.
En relación a la discriminación,
indica que siete de cada 10 afirman haber sido discriminados, ser pobre o
indígena serían las principales causas, sin embargo sólo dos de cada 10
reconocen haber discriminado. Estos datos ponen en evidencia la contradicción
entre quienes se sienten discriminados y quienes discriminan, lo que significa
que no se asume responsabilidad en relación a este tema. Los encuestados creen
que es posible erradicar este problema a través de la educación.
Respecto a la conflictividad y
violencia, según los consultados la pobreza, la falta de empleo y la
discriminación serían los principales detonantes de conflictos sociales en el
país. La quinta parte de la población habría participado en un conflicto
social.
La mitad de los
entrevistados considera que la sociedad es violenta y casi la totalidad de
ellos expresa que Bolivia necesita ser un país pacífico. De igual manera, la
mayoría de los encuestados dice no estar de acuerdo con los linchamientos,
contradictoramente más de la mitad cree que se justifican cuando la violencia
está descontrolada o cuando la policía o la justicia no cumple con su función.
En cuanto a la equidad y el bien
común, más de dos tercios de la población piensan que no hay equidad en el
país; el acceso al empleo y la distribución de riqueza son los principales
ámbitos de inequidad; también se considera que existe desigualdad entre mujeres
y hombres debido a una cultura machista y a la educación. Tres de cada cuatro
entrevistados conocen el significado del bien común, más de la mitad de los
encuestados cree que en Bolivia se busca el bien común, en mayor porcentaje en
ciudades intermedias que en ciudades capitales.
La mayoría de la población
encuestada considera muy importante el derecho a la información y la
comunicación. Por un lado, una de cada dos personas confía en la información
brindada por los medios de comunicación y quienes desconfían señalan que éstos
siguen una línea política; y por otro, exigen mayor información al gobierno en
todas sus instancias. La libertad de expresión también está en cuestión por un
alto porcentaje de las y los encuestados.
Desde el año 2006, la Fundación
UNIR ha realizado esfuerzos para conocer las percepciones de la población
boliviana sobre una serie de temas clave, como equidad, bien común,
interculturalidad, comunicación democrática, conflictividad social y violencia,
que influyen en la convivencia social. Para ello ha efectuado encuestas
periódicas en los años 2006, 2008 y 2011.
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