Lima, 28 Mayo (LÍDER / PL).- El candidato presidencial peruano Ollanta Humala ratificó hoy su promesa de reformas, al cierre de una semana de fortalecimiento de su posición para la segunda vuelta electoral ante Keiko Fujimori el 5 de junio.
A ocho días de la crucial definición, Humala señaló que el proceso de concertación con otras fuerzas y la dispersión de fuerzas en el parlamento ha dejado en pie su decisión de impulsar reformas constitucionales para una mayor presencia del Estado en la sociedad y la economía.
Señaló que la ausencia estatal atenta contra la integración nacional y que las reformas son necesarias para la lucha contra la pobreza y la desigualdad que se propone realizar a través de un programa de medidas de beneficio social directo, que incluye mejoras salariales.
Humala dijo que respetará los resultados electorales pero demandó que sean transparentes y fiel reflejo de la voluntad popular, la que "tenemos que defender y hacer respetar", ante lo que consideró parcialización del gobierno con su rival.
Ante insistencias de un mayor compromiso de acatamiento de los resultados, sugirió a los reporteros que le pidan garantías al presidente Alan García, que tiene el poder para influir electoralmente.
Las sospechas de seguidores de Humala sobre un posible fraude dieron pie a ataques de Fujimori que lo acusó de querer patear el tablero por temor a una derrota, y a declaraciones del gobierno y los organizaciones electorales de garantías de comicios limpios.
El candidato del bloque progresista Gana Perú defendió también el derecho de consulta, consagrado internacionalmente, a las comunidades sobre proyectos mineros y petroleros en su habitat.
Señaló que la entrega de concesiones mineras sin esa consulta provocó el conflicto, que mantiene cerrada la frontera con Bolivia desde el 9 de mayo y el jueves derivó en disturbios y vandalismo en la ciudad de Puno, capital regional.
Llamó a los huelguistas, que dialogan con el gobierno, a levantar la protesta para viabilizar la elección del 5 de junio, cuya frustración en Puno lo perjudicaría, pues tieene ayer un apoyo de cerca de 70 por ciento.
No se preocupen, el 28 de julio (cuando asumiría la Presidencia si gana) vamos a solucionar definitivamente el problema, señaló, a tiempo de exigir al gobierno que solucione el conficto mediante el diálogo y no lo agrave.
Ante resistencias del gobierno a la aplicación del derecho de consulta, Humala dijo que los proyectos mineros o petroleros solo deben hacerse con la anuencia de las comunidades, como reclaman los indígenas.
El líder nacionalista fortaleció su posición en la semana al recibir el apoyo del expresidente Alejandro Toledo, por el rechazo a la posibilidad del restablecimiento del gobierno de mano dura de Alberto Fujimori (1990-2000), el encarcelado padre de la candidata Keiko.
Similares preocupaciones motivaron masivas marchas de rechazo a la candidatura fujimorista, con gran participación de jóvenes.
Esas movilizaciones fueron promovidas por organizaciones defensoras de derechos humanos en Lima y siete capitales regionales.
Además, una encuesta del Instituto de Opinión Pública de la Universidad Católica indicó que hay un empate técnico entre Humala y Fujimori, con ventaja para la primera de apenas seis décimas (50,3-49,7 por ciento).
La cifra no toma en cuenta los votos en blanco o nulos y analistas electorales anotan que Humala tiene "voto oculto", es decir de ciudadanos que se inhiben de decir que votarán por él, ante la presión de la mayoría de la prensa que lo ataca a diario.
El resultado contrasta con los de dos sondeos previos que daban mayor ventaja a la candidata, realizados por empresas cuyos dueños enfrentan acusaciones judiciales por haber recibido dinero ilícito a cambio de hacer encuestas para la última campaña reeleccionista de Alberto Fujimori, en el año 2000.
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