Moscú, 25 Jun. (LÍDER / PL).- La Cancillería rusa expresó hoy su preocupación por la política unilateral de sanciones estadounidenses contra Irán y consideró que las nuevas medidas crean muchas interrogantes sobre sus objetivos reales.
Bajo el pretexto de su relación con la actividad de proliferación nuclear, Washington anunció restricciones contra el mayor punto iraní de operaciones portuarias Tidewater Middle East Company y contra la aerolínea Iran Air, destaca una nota de la dependencia rusa.
Tales acciones, basadas en la aplicación extraterritorial de la legislación norteamericana, poco a poco crean una situación en la cual son dañados los intereses de empresas rusas con vínculos comerciales con compañías iraníes, agrega la nota oficial.
Ello rompe con las bases de nuestra cooperación en el marco del llamado sexteto para Irán (Rusia, Estados Unidos, China, Francia, Gran Bretaña y Alemania) e influye negativamente en la autoridad del Consejo de Seguridad (CS) de la ONU, subraya.
Además, tales medidas refuerzan las sospechas de Rusia de que la política de sanciones estadounidense respecto a Teherán busca objetivos muy diferentes al de conservar el régimen de no proliferación nuclear, destaca el documento de la Cancillería.
Nuestra posición es conocida: la aplicación de restricciones unilaterales norteamericanas contra personas jurídicas o privadas rusas contradice el actual estado de los nexos entre nuestros países, señala el ministerio ruso de Relaciones Exteriores.
Tal política es inadmisible y debe ser revisada completamente, afirma la declaración oficial.
Rusia respaldó el 9 de junio de 2010 la resolución 1929 del CS de la ONU sobre Irán, por el cual se restringen actividades financieras para comprar armamentos y para los Guardianes de la Revolución, así como permite inspecciones en el mar de barcos del país persa.
Bajo el pretexto de su relación con la actividad de proliferación nuclear, Washington anunció restricciones contra el mayor punto iraní de operaciones portuarias Tidewater Middle East Company y contra la aerolínea Iran Air, destaca una nota de la dependencia rusa.
Tales acciones, basadas en la aplicación extraterritorial de la legislación norteamericana, poco a poco crean una situación en la cual son dañados los intereses de empresas rusas con vínculos comerciales con compañías iraníes, agrega la nota oficial.
Ello rompe con las bases de nuestra cooperación en el marco del llamado sexteto para Irán (Rusia, Estados Unidos, China, Francia, Gran Bretaña y Alemania) e influye negativamente en la autoridad del Consejo de Seguridad (CS) de la ONU, subraya.
Además, tales medidas refuerzan las sospechas de Rusia de que la política de sanciones estadounidense respecto a Teherán busca objetivos muy diferentes al de conservar el régimen de no proliferación nuclear, destaca el documento de la Cancillería.
Nuestra posición es conocida: la aplicación de restricciones unilaterales norteamericanas contra personas jurídicas o privadas rusas contradice el actual estado de los nexos entre nuestros países, señala el ministerio ruso de Relaciones Exteriores.
Tal política es inadmisible y debe ser revisada completamente, afirma la declaración oficial.
Rusia respaldó el 9 de junio de 2010 la resolución 1929 del CS de la ONU sobre Irán, por el cual se restringen actividades financieras para comprar armamentos y para los Guardianes de la Revolución, así como permite inspecciones en el mar de barcos del país persa.
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