La Paz, 25 Nov. (ABI).- El presidente de la Cámara de Senadores, René Martínez, calificó el viernes de "cínicas" a las personas que culpan al Gobierno de incluir la palabra "intangibilidad" en la Ley Corta del TIPNIS, como venganza contra los indígenas de ese parque nacional.
La Ley Corta promulgada por el presidente Evo Morales, por exigencia de los indígenas, prohíbe la construcción del tramo II de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos o cualquier otra por el Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), y declara intangible a esa región amazónica.
"Quiero decir flagrantemente a ese atrevimiento, osadía que se ha señalado, de que estuviéramos utilizando el concepto de intangibilidad como una venganza contra los indígenas, por qué esas personas no son más éticas y sinceras consigo mismo, porque esa es la mayor expresión del cinismo", señaló Martínez a periodistas.
Explicó que quiénes incorporaron el concepto de intangibilidad en la Ley fueron los dirigentes y parlamentarios indígenas, que exigieron que ese sea una de las condicionantes para la aprobación de la norma, tras la marcha en oposición a la construcción de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos por ese territorio.
"Por lo tanto dejemos de ser cínicos para querer hacer que el concepto de intangibilidad sirva como escudo para que hagan lo que les venga en gana a quienes han logrado la Ley Corta", argumentó.
Asimismo, dijo que si ese territorio indígena es un "verdadero parque", se deben aplicar mecanismos Constitucionales de medio ambiente para impedir nuevos asentamientos humanos, además de regular y controlar su preservación.
"Estamos hablando de un parque casi virgen que debería estar solamente para la investigación y conocimiento, el cual deberíamos tenerlo como un verdadero pulmón del país, pero hemos constatado que existen pistas de aterrizaje, hoteles de cinco estrellas en los que se paga seis mil dólares por cuatro días y se da 200 dólares de beneficio a la comunidad, además de la explotación de madera de que se pretendía ocultar en beneficio de terceros sin participación del Estado", sostuvo.
Dirigentes de la CIDOB y del Conamaq afirmaron que el Gobierno no fue sincero, respecto al conflicto y señalaron que su actitud "es un tipo de venganza o escarmiento hacia los indígenas amparado en una ley mañosa".
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