La Paz, 6 Dic.
(ANF).- El presidente Evo Morales reveló este jueves que tiene información de
primera mano y confirmada sobre la presencia de “gente infiltrada” en los
ministerios de Estado con el mandato de hacer quedar mal al Gobierno, a su
investidura y al proceso de cambio, por lo que pidió a los titulares de las
diferentes carteras de Estado, en especial al ministro Carlos Romero y
viceministro Jorge Pérez informarse en detalle sobre estas personas que andan
por la administración pública haciendo buena letra, pero con malas intenciones.
El Jefe de
Estado se refirió, después de diez, de forma directa a la existencia de la red
de corrupción y extorsión que operó desde los ministerios de la Presidencia y
de Gobierno desde un poco más de cinco años. “Tal vez no pueden robar en el
Ministerio de la Presidencia, no pueden robar en el Ministerio de Gobierno,
desde ahí se organizan para extorsionar, chantajear, usar fiscales y jueces, a
mí me ha sorprendido eso es otra forma de extorsión y de corrupción”, dijo.
El mandatario
realizó estas declaraciones públicas desde el hall de Palacio de Gobierno tras
la posesionó del coronel Alberto Aracena como nuevo comandante General de la
Policía en reemplazo del coronel Víctor Santos Maldonado, quien ocupó el cargo
desde el mayo pasado tras el cambio del general Jorge Santiesteban, acusado y
procesado en la justicia ordinaria por el ingreso irregular de cadetes a la
Academia Nacional de Policías, vía pago de prebendas.
El diputado del
MAS, Edwin Tupa y el senador Fidel Surco pidieron al presidente Evo Morales
realizar una depuración en el aparato estatal para despedir de la
administración pública a gente de la derecha y ex funcionarios de “gobiernos
neoliberales” que se infiltraron en el gobernante MAS para extraer información
en procura de hacer daño a la gestión del Jefe de Estado, debido a que a esa
gente “no le ha costado nada el proceso de cambio”.
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