Chile, 4 Jun. (LÍDER).- "Un puñal clavado en el continente" fue la metáfora con que ayer el vicepresidente de Bolivia, Alvaro García Linera, se refirió a la mediterraneidad de Bolivia.
A tres días de que se reúna la Asamblea General de la OEA, el personero boliviano detalló la estrategia de su país en el cónclave hemisférico, que se realizará en San Salvador.
Bolivia ya había anunciado que protestaría contra Chile. Sin embargo, García Linera explicó que su país buscará ratificar una resolución de 1979, en que la asamblea de la OEA -reunida en La Paz- declaró "de interés hemisférico permanente encontrar una solución equitativa por la cual Bolivia obtenga acceso soberano y útil al océano Pacífico".
Además, dicha resolución recomendó a los países "que este problema concierne directamente, que inicien negociaciones encaminadas a dar a Bolivia una conexión territorial libre y soberana con el océano Pacífico".
"Ese año hubo un gran respaldo a la demanda marítima de Bolivia, garantizando una salida soberana. Esa fue una gran señal de la OEA y vamos a buscar que se la ratifique", indicó García Linera.
Esta decisión paceña abre uno de los escenarios que más inquietud provocaban en Chile: que Bolivia no sólo hiciera su tradicional informe de las tratativas con Santiago, sino que también pidiera a la asamblea pronunciarse sobre una resolución en específico.
Los cálculos bolivianos apuntan a que no habría razón para que los 33 países integrantes de la asamblea se negaran a refrendar un acuerdo ya adoptado. Así, aunque la resolución sería la misma que ya existe, La Paz podría exhibir un fuerte respaldo regional a la idea de una solución con soberanía, algo a lo que Chile se ha negado explícitamente.
En Santiago, en todo caso, dicen que el respaldo de 1979 fue conseguido en un contexto distinto, en el que influyeron las críticas de la región al gobierno del general Augusto Pinochet.
Como sea, el canciller Alfredo Moreno tiene previsto conversar con la mayor cantidad de cancilleres posible en la antesala de la cita de la OEA. Moreno llega hoy a San Salvador. En paralelo, La Paz ha hecho gestiones con los países de la región para asegurar apoyo.
En Chile, en todo caso, vieron con atención la molestia que provocó en Argentina el hecho de que Evo Morales recibiera el jueves al ministro de Defensa iraní, requerido por la justicia transandina por el atentado a la sede de la Amia, en 1994.
FUENTE: Erbol/Tomado de La Tercera
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