jueves, 8 de diciembre de 2011

DORIA MEDINA DICE QUE LA COCA DEBE PAGAR IMPUESTOS COMO OTROS PRODUCTOS


La Paz, 8 Dic. (ANF).- Los cultivadores de hoja coca sí deberían pagar un impuesto por la producción y comercialización del arbusto milenario que se consume como acullico o, en otro extremo, va destinado a la fabricación ilícita de alcaloides, según el empresario y político Samuel Doria Medina.

“La coca debería pagar los impuestos que pagan los otros productos. Para comenzar si pagaran IVA (Impuesto al Valor Agregado) los productores de coca, ya sería un gran avance, porque en la actualidad la producción de coca no paga ningún impuesto y lo que paga es una proporción del valor que tiene”, afirmó Doria Medina al ser consultado si este sector productivo debería pagar un impuesto como los hacen todas las actividades productivas en el país.
Información proporcionada por el Viceministerio de Coca y Desarrollo Integral da cuenta que en el país el número de cocaleros superaría los 42 mil, de los cuales, alrededor de 35 mil pertenecen a los Yungas paceños y unos siete mil al trópico cochabambino; teniendo cada uno de ellos un ingreso trimestral que bordea los 12 mil bolivianos, por concepto de la venta de un cato de coca, actividad desarrollada cuatro veces al año generando un ingreso anual de 48 mil bolivianos por cocalero. En contrapartida, un ciudadano promedio en el país que perciba el salario mínimo nacional (815 bolivianos) apenas logra generar por año 9.780 bolivianos.

En ese aspecto, Doria Medina consideró que “hay estudios que plantean que solamente con ocho mil hectáreas de coca se tendría toda la coca necesaria para el consumo tradicional”.
“Sin embargo, estamos alrededor de las 30 mil hectáreas en el país, lo que nos dice muy claramente que tres veces más de coca va hacia el narcotráfico sin ningún control. Efectivamente, para que haya más cocaína tiene que haber más producción de coca y ese es un tema que no se ha resuelto”, manifestó el empresario y político líder de Unidad Nacional (UN).

La mañana de este miércoles, Doria Medina presentó el ensayo “Visión de país: consenso del bicentenario”, en el mismo plantea que “el país debe enfrentar con rigidez estratégica y flexibilidad táctica la amenaza a su soberanía y tranquilidad que representa el narcotráfico. Señala límites firmes a los productores de coca, pero evita entrar nuevamente en una confrontación sin sentido con ellos”.

Para el líder de Unidad Nacional, “no se puede negar el crecimiento del narcotráfico en el país. Monseñor Tito Solari de la Iglesia Católica lo denunció y fue víctima de una serie de amenazas, pero cada día, lastimosamente, se van confirmando que el narcotráfico en nuestro país está creciendo de manera mucho más acelerada que todo el resto de la economía y eso es preocupante”.

Coincidente con los criterios del empresario, el representante en Bolivia de la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito (UNODC), César Guedes, manifestó su preocupación por la inminente presencia de cárteles mexicanos y colombianos que estarían operando en el país.

Mientras tanto, en el Viceministerio de Coca y Desarrollo Integral en Bolivia es importante el número de cultivadores de coca, debido a que esa actividad genera buenos réditos económicos sin que sea necesaria una gran inversión, ni trabajo físico. En algunas poblaciones del país la cosecha de coca se realizaría incluso cada 50 días, lo que significa una ganancia de 12 mil bolivianos cada dos meses.

“De una hectárea se puede llegar a cosechar entre unas 600 a 700 libras de coca, estamos hablando de unos 10 a 12 bultos de coca, ponle a mil, son 12 mil bolivianos. Esto es cada tres meses, cada 90 o 100 días se cosecha; sin embargo, en los sectores amazónicos, como el Trópico, son cada 50 o 60 días las cosechas, es más rápido, su volumen de producción es mayor y ganan más”, aseguró Germán Loza titular del Viceministerio de Coca a GAIA Noticias.

La cantidad de hectáreas plantadas con coca en Bolivia superan ampliamente el número de sembradíos de productos del desarrollo alternativo. De acuerdo a Loza, solo existen alrededor de siete mil hectáreas plantadas con café, cítricos y bananos, mientras que en todo el país los plantíos de coca superan los 30 mil.

“A nivel de los Yungas de La Paz estaríamos hablando de unos 35 mil productores y a nivel del trópico unos siete mil, en total alrededor de 42 mil en todo el país. Mientras que en el sector del desarrollo alternativo se ha cambiado mucho, tanto en el Trópico, como en los Yungas de La Paz, estamos hablando de unos 10 mil compañeros que ya han cambiado mucho”, manifestó.

El Viceministro de Coca sostuvo que en el Chapare solo existen siete mil cocaleros, otros informes indican que el número de personas dedicadas a este cultivo superan los 90 mil, por lo que el cálculo realizado por la autoridad diferiría en 83 mil personas.

En el caso de los Yungas de La Paz, la Asociación de Productores de Coca (ADEPCOCA) reporta que a esa organización están afiliados 27 mil productores, ocho mil menos a los datos que maneja el Viceministerio.

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