La Paz, 14 Dic. (ANF).- El representante de la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito en Bolivia (UNODC), César Guedes, dijo este miércoles sentirse preocupado por el crecimiento de la violencia producto del tráfico de cocaína en el departamento de Santa Cruz, por lo que recomienda a las autoridades gubernamentales acabar con este mal que se podría propagar como en otras regiones del país y el continente. Guedes destacó que la sociedad boliviana aún no se haya tornado violenta, aunque el país se haya convertido en una región de tránsito de cocaína, circulo delictivo que podría dañar a la población de las regiones por donde circula la droga.
“Vemos con preocupación que hay esquemas de violencia en lugares fronterizos, con mayor intensidad en el departamento de Santa Cruz y la ciudad misma, estos son lugares ya donde la droga está dejando Bolivia, por ello existe custodios que buscan proteger que el movimiento de droga al interior de esta zona cruceña no sea interceptada, porque su valor es mayor, entonces es preocupante esta situación, pero se está a tiempo de tomar las riendas sobre este asunto emergente”, señalo Guedes a PAT.
EMISARIOS DE LA DROGA: Si bien la presencia de cárteles internacionales del narcotráfico aún no fue comprobada, existe preocupación de la oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito por la presencia de líderes de estos grupos que podrían haber llegado al país por la conexión que tienen en la región.
“La presencia de emisarios del narcotráfico es posible, pero es menos grave que en los otros países porque hay una menor producción de cocaína, pero Bolivia se está convirtiendo en un país de tránsito (…), considerando que los tres países productores de cocaína en el continente son Perú, Colombia y Bolivia; los dos primeros tuvieron la presencia de las FARC y grupos de Sendero Luminoso”, sostuvo.
Guedes también coincidió con las palabras del presidente Evo Morales quien afirmo que los grupos del narcotráfico están mejor equipados tecnológicamente lo que los vuelve peligrosos para las sociedades donde operan.
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