Cochabamba, 15 Dic. (La Prensa).- El presidente Evo Morales pidió a la Asamblea Plurinacional aprobar una ley que dé facultades operativas y de combate a los aviones K-8 para la lucha contra el narcotráfico, norma que permitirá derribar a las avionetas dedicas al transporte de cocaína, en el caso de que no obedezcan el pedido de aterrizaje. “Es importante dotarnos de ciertas normas para derribar a esas avionetas narcotraficantes. Necesitamos normas, sabemos que en algunos países tienen leyes, pero en Bolivia no”. El Mandatario hizo la solicitud en un acto de entrega del sistema de armas de los seis aviones K-8, realizado en la base aérea de Cochabamba.
Morales dijo que si alguna avioneta no obedece a ciertas instrucciones y existe la información, “si estamos convencidos que es un avión que lleva drogas o trae precursores para la fabricación de estupefacientes, será responsabilidad de la Asamblea Legislativa Plurinacional”.
LA OPERACIÓN. Según el comandante de la FAB, general Tito Gandarillas, los K-8 están listos para luchar contra el narcotráfico, con su sistema de armas y doce pilotos formados en China, no obstante agregó que espera que “muy pronto” se adquieran los radares, necesarios para detectar aviones que violen el espacio aéreo boliviano y trafiquen con drogas; además que tienen la capacidad de derribar otras aeronaves hasta en cinco segundos.
En anteriores días, el comandante del Grupo Aéreo de Caza 34, Gonzalo Sempértegui, explicó que los K-8 son de empleo táctico para ataques livianos y que pueden adecuarse a la misión en contra del tráfico ilícito de drogas.
4 helicópteros de entrenamiento comprará el Gobierno, para reforzar el trabajo de los pilotos.
Los K-8 pueden derribar a otras aeronaves hasta en cinco segundos.
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